Candidatos de partidos extraños se comprometen a ponerles cuotas de votos a liberales, conservadores, a los de la U y Cambio Radical. Y, obvio, estos últimos aceptan con amplia sonrisa.
Por Chachareros y cortesía de revista Semana
Lo más grave de todo no es como lo dice la revista Semana, que el próximo Congreso va a estar lleno de pensionados; es decir, de Senadores y Representantes que ya deberían retirarse a sus cuarteles de invierno, sino el coctel intoxicante de las alianzas más exóticas en un departamento como Atlántico.
Es de suponer que lo mismo sucede en los demás departamentos, y ni qué decir de Bogotá, en donde se concentra la podredumbre política. En esas condiciones, ¿habrá disciplina de partido?, ¿votarán las bancadas en forma disciplinada?
Es cierto que, como lo registra Semana, en el solo caso del Atlántico está Roberto Gerlein con 55 años de vida política y una edad que exige reposo en una casa de campo. En las mismas condiciones está su compañera de fórmula la exdiputada Betty Echeverría, quien tiene los mismos años que lleva su jefe en la política.
En ese mismo grupo el contrapeso es una candidata a la Cámara, Aida Merlano, joven, esbelta, bonita, pero le dicen la ‘muda’. No habla. No hace rueda de prensa. Rehuye a los periodistas y prefiere hablar a través de un ventrílocuo.
Pero Roberto Gerlein no es el único, sino que baje la mano Álvaro Ashton; o Efraín Cepeda, que a pesar de ser joven de edad frente a los demás tiene más de dos décadas en el Capitolio. Menos mal ya Fuad Char le dejó paso a la aspiración de su hijo Arturo, sino nos íbamos de bote lleno a la tercera edad. Y que en paz descanse José Name Terán, otrora inamovible del Atlántico en el Congreso.
Pero sigamos con el coctel actual:
Los pactos del ‘Gato’
El actual representante a la Cámara del Partido Conservador, Laureano Acuña, quien se ‘sabaleó’ (traicionó) de las toldas gerleinistas que lo eligieron, montó su grupo aparte y es candidato al Senado con el aval del conservatismo. Su candidata a Cámara es Inés López. Pero Laureano Acuña, mejor conocido en la política local como ‘El Gato Volador’ (recordando la champeta muy escuchada en su sector de residencia), ha concretado pactos para ponerle 10 mil votos a Modesto Aguilera (candidato a Cámara de Cambio Radical, quien recibiría, además, toda la votación que tiene Fuad Char en la provincia).
Los Gerlein no se han quedado quietos
Acaban de cerrar acuerdo con el grupo conservador soledeño que orientan el diputado Sergio Barraza Mora y su hermana Astrid Barraza, concejal de Soledad. Antes el grupo barracista estaba con el sector conservador que orientan el Senador Efraín Cepeda Sarabia y el Representante Armando Zabaraín. Este grupo se ha fortalecido con buena burocracia a nivel nacional. Tienen en la dirección del Ica a Luis Humberto Martínez, acaban de nombrarles al secretario general de ese mismo instituto Wilson Pérez De la Rosa, y manejan puestos de bajo perfil pero estratégicos en decenas de entidades con buen presupuesto para contratos.
El exsacerdote Bernardo Hoyos políticamente no ha muerto, aunque la Procuraduría lo haya sacado del tinglado. Su movimiento está activo y, dicen los expertos, cuenta con una buena votación en la Zona Negra y todo ese sector subnormal que va al Rincón Latino a que les solucionen sus problema y a rendirle pleitesía.
Se asegura que Hoyos Montoya comprometió su votación para Senado con Armando Benedetti Villaneda, quien siempre que viene a Barranquilla va a confesarse al Rincón Latino, y para Cámara dividirá sus votos entre Mauricio Gómez Amín (liberal) y Modesto Aguilera (Cambio Radical).
¿Alguien quiere tomarse este coctel cuando se encuentren en el Congreso? Solo Santos o Uribe aguantan esta pócima, como buenos brujos del poder.
Publicidad cuestiona a los “jubilados” de la política
Un video de campaña pone en entredicho que senadores como Gerlein, Serpa y Uribe vuelvan al Congreso. Ver video en el siguiente enlace de la revista Semana:
El próximo Congreso estará lleno de excandidatos presidenciales y viejas glorias de la política que fueron protagonistas hace varias décadas. Se da por descontado que Horacio Serpa, Antonio Navarro, Álvaro Uribe, Roberto Gerlein, entre otros, llegarán al capitolio a debatir proyectos de gran envergadura.
Por eso hay quienes dicen que ese Congreso será una suerte de constituyente, porque deberá diseñar la arquitectura institucional ante un eventual acuerdo de paz.
Aunque esa vieja guardia de la política augura un debate con altura, tiene una debilidad: no inspira renovación. Con ese talón de Aquiles en mente, el aspirante a la Cámara de Representantes Rodrigo Lara, hijo del inmolado ministro de Justicia que denunció al cartel de Medellín, hizo un aviso publicitario para pedir que voten por él.
En las primeras imágenes se ve a los políticos dando discursos, luego aparece el número de años que cada uno de esos políticos tiene en la profesión. Por ejemplo, Gerlein, el cacique del Atlántico, quien sería el congresista con más tiempo en el Senado, tiene 55 años de vida pública. Luego una voz en off pronuncia la frase “y tenemos el país que tenemos”.
En otro video que hace parte del mismo paquete publicitario que verán los televidentes, el expresidente Uribe sale vociferando frases ininteligibles con tono rabioso. Al final el candidato al Senado Germán Varón, hoy representante, dice: “¿No creen que es tiempo de pasar la página?”.
Varón Cotrino, como presidente de la Cámara, fue uno de los protagonistas de la oposición al referendo que buscaba reelegir a Uribe por segunda vez.
Los mensajes de estas campañas ponen el dedo sobre un hecho perturbador: hay muy pocas caras renovadoras visibles en la política. La pregunta es si los protagonistas de estas campañas son esa cuota de renovación que se necesita.