El partido superclásico entre la selección Colombia y Chile que define un tiquete al Mundial de fútbol rompió todos los récord en la economía informal de Barranquilla.
Escrito Por: Francisco Figueroa Turcios
Editor de Deportes
Juan Zarate lleva 25 años vendiendo limonada y jamás pasó por su mente que el partido entre los seleccionado de Colombia y Chile le diera para ganar en un día el dinero que se logra trabajando de sol a sol en dos semanas: 200 mil pesos.
La buena racha comenzó el domingo, cuando pasó por el parque Suri Salcedo y vio agolpada desde bien temprano a mucha gente.
Al principio pensó que esa inmensa cola era para recibir el pago de los auxilios del programa presidencial Colombia Mayor, pero se acercó a indagar y se llevó la sorpresa: ese gentío’ era para esperar turno para comprar la boleta en el partido del 9 de octubre entre Colombia y Chile.
No dudó dos veces, se quedó allí y se evitaría andar deambulando por las calles de Barranquilla ofreciendo su limonada.
«Me sorprendí porque habían anunciado la venta de la boletería para el miércoles y desde el domingo ya había largas colas para hacer turno para comprar la boleta.Yo mismo me dije esto pinta bien y le recé a la virgen del Carmen para que no lloviera en el día y que el sol saliera con todos los hierros para hacerme mi agosto».
Pero sus cálculos fallaron, normalmente en el día se gana máximo 20 mil pesos. Desde el domingo hasta el martes ha vendido un promedio diario de 200 mil pesos. «Tengo que tanquear cuatro veces al día, porque se me agosta rápidamente. La limonada que yo vendo es reconocida. Además, a la cantidad de cachacos que han venido de Medellín y Bogotá les ha gustado», comenta Juan Zarate.
Además vislumbró que podía aprovechar al máximo esta bonanza del partido entre Colombia y Chile y le colocó un negocio de venta de chuzo a su hijo Nando.
Tienen horarios diferentes. Su hijo solo trabaja al medio día, hora del almuerzo y en la tarde-noche, hora de la cena.
La gente no se mueve de los puestos, por lo que comen comidas rápidas y toman mucha líquido para hidratarse ante el fuerte calor.
Mientras que Juan Zarate montó su micro-empresa familiar, Dairo Polo, que vendía arroz en el Centro, se enteró por la radio que habían inmensas colas de personas que esperaban turnos para comprar la boleta.
También subió al estadio de baloncesto Elías Chewing para ganarse unos pesos. Comenzó la buena racha: vendió todo el caldero y llamó a la mujer para que le tuviera listo para la otra de la cena tres ollas, una con arroz de lisa, otra con arroz de fideo y la última con arroz blanco para tener diferentes alternativas. De 25 mil pesos que se ganaba diariamente, en un sólo día vendió 350 mil pesos.
«Estas son oportunidades que no se presentan diariamente, este mes arrancó mal por la lluvia, pero estos tres días me saqué el billete para los aguinaldo de los pelaos ahora en diciembre.
Estaba triste porque no veía de dónde iba a sacar el dinero para comprarle los regalos y Dios no ha dado esta bendición», señala Dairo Polo, mientras despacha a la clientela.
Por su parte Javier Varela, el domingo que venía en el bus de Cochofal, con su bandeja de pan de bonos, venía pensativo sobre qué nueva ruta tomaría porque los últimos días le había ido mal en las ventas, cuando pasó por la calle 72 con 46 y miró hacia el parque Suri y vio la fila. Afanosamente le pidió la parada al chofer y se bajo, se persignó y dijo: «este es mi día».
«A la hora de estar allí ya había vendido todos los pan de bonos. Me devolví con las mismas a buscar más y en un día logré vender seis bandejas. Normalmente en un buen día vendo dos. Se me apareció la Virgen con el partido de la selección Colombia. Nos favoreció porque esta vez pusieron más boletas a la venta en Barranquilla y ha venido mucha gente de otras ciudades, esto genera movimiento en la economía informal», dice Javier Varela.
La economía informal le ha sacado el mejor partido al compromiso de Colombia. Allí en el estadio de baloncesto Elias Chewing uno puede encontrar de todo como en botica: raspao, perros calientes, patillazo, peto, arroz de lisa, venta de minutos, alquiler de sillas, limonada, chuzos.