“Han dejado pasar muchos años para tomar las medidas apropiadas”, según el ingeniero Alberto Monterroza Romero.
Por Chachareros
La Costa Caribe colombiana vive uno de sus momentos más críticos en materia de servicio de energía eléctrica. Así lo reconocen expertos independientes, desde una óptica sin sesgos, como es el caso del joven ingeniero eléctrico Alberto Monterroza Romero.

Minutos previos al programa, panelistas e invitados revisan sus iPhone, hacen anotaciones, reciben mensajes e intercambian datos.
“Las plantas térmicas trabajaron y trabajaron años y años sin que se les hicieran, a tiempo, los mantenimientos adecuados. Y con estas plantas ocurre lo mismo que con los aviones de carga o pasajeros. Se va produciendo lo que los ingenieros de la aeronáutica denominan el ‘desgaste del metal’, por lo cual ordenan en una aeronave se mantenga en tierra hasta cuando no se someta a una reparación completa y total”, según Monterroza Romero.
Las hidroeléctricas, no están en mejores condiciones que las térmicas. Las maquinarias de Urrá reciben el mismo trato desdeñoso que las térmicas. “Se han dejado pasar muchos años para tomar las medidas apropiadas, y ahora, para recuperar ese tiempo perdido, cuesta cinco veces más que el costo inicial si el mantenimiento se hubiera realizado a tiempo”, asegura Monterroza.
Fue el tema “duro” en el programa radial La Cháchara por 94.1 de la Uniautónoma FM Stereo, de este sábado. El espacio fue matizado por un completo informe con la visión del editor general Jorge Mario Sarmiento Figueroa y Fernando Alzate, barranquillero residente hace varios años en Canadá, quienes fueron a explorar los misterios de la profunda selva amazónica, después de la ‘fiebre’ amazónica por el ‘Abrazo de la serpiente’, la película colombiana nominada en los Premios Oscar.
No ganó, pero les sirvió a Jorge Mario y a Fernando para realizar unos trabajos admirables y sorprendentes, como ese ‘concierto’ de millares de loros y cotorras en un aleteo y tronar de picos de manera armónica y sin pausa. El real chachareo en vivo y en directo. Es el origen de la palabra cháchara en español, y chat en inglés.
El video, que todavía se puede ver en este portal, es más que elocuente del estupendo trabajo periodístico realizado por los dos jóvenes expedicionarios, con ojo de periodistas, a los misterios del único pulmón que le quede al Mundo.
Y, claro, como es un programa que atrae a creadores de toda índole, Julio de Vivero y Tomás Angulo, dos verdaderos jóvenes emprendedores de tecnología, explicaron en qué consiste la página web que crearon. Un portal novedoso y muy útil que ayuda a estudiantes a conocer más a sus profesores a la hora de armar horarios. Ellos fueron de la mano de Mónica Santander, y fueron atacados a preguntas por parte de Gerson Brugés, quien estaba perdido ’como Miguel Canales’, y reapareció este sábado con una energía contagiosa. Y con Gerson le cayeron en gavilla a los pupilos de Mónica Santander las jóvenes reporteras del panel de La Cháchara Andrea Corro y Melissa Ochoa.

Mónica Santander hace la presentación de sus pupilos, los jóvenes emprendedores, Julio De Vivero y Tomás Angulo.
Manón, la delegada de la Alianza Francesa que fue a divulgar el Festival que organiza todos los años esa casa cultural, también participó de manera amplia con disponibilidad para que panelistas como Héctor Cabarcas recordara episodios franceses en Taganga.
Y en medio de los temas cotidianos de La Cháchara, no faltó la música alegre que incita a mover el cuerpo, a cargo de dos mujeres que alborotan una verbena, Jean del Tambó y Orito Cantora, del grupo La Chalupa. ¡Qué versatilidad! Jean del Tambó toca ese tambor como una diosa y Orito mueve esas maracas con maestría y canta con una voz potente y melodiosa, con todo el sabor de las raíces de la música con sabor a Río Magdalena. Y nos queda pendiente el joven que maneja los temas de la Semana Santa como todo un respetable lector de las Sagradas Escrituras. El chachareo de este sábado estuvo muy ameno. Como siempre. Modestia aparte.