Para el sur del Atlántico, además de seguridad con el Gaula y el Ejercito, se compromete con agilizar la recuperación de las tierras cultivables.
Por Rafael Sarmiento Coley – Director
Al presidir un Consejo de Seguridad este sábado en Barranquilla, Juan Manuel Santos comprendió que este ha sido un clamor constante de los barranquilleros y atlanticenses durante los cuatro años en que él ha estado cumpliendo su mandato.
Por ello, en el primero de dos días que estará en esta sección del país, al término del Consejo de Seguridad, Santos anunció que la Policía del departamento del Atlántico dispondrá 300 nuevos agentes a más tardar en junio próximo.
Bueno, fue muy aplaudido por los presentes, porque ese, de verdad, es el clamor durante su cuatrienio, y el de la alcaldesa Elsa Noguera, que ha sido impotente, junto con su asesor de alta seguridad, Guillermo Polo, que ha recibido palo por todas partes porque la inseguridad ha superado, de manera contundente, su capacidad de diseñar estrategias exitosas.
Reuniones «importantes»
La reunión importante de este sábado la tuvo Santos en privado con empresarios y políticos locales que lo apoyan 100% para su reelección, previos compromisos.
Lo malo de esos acuerdos es que, en su mayoría, son empresarios de la construcción, a quienes solo les interesa recuperar la plata invertida en sus candidatos a Congreso (se asegura que un importante empresario de la construcción invirtió en su candidata pechichona a la Cámara cuatro mil millones de pesos, y lo peor es que se trata de una niña consentida sin nada de preparación). Y los otros son los clásicos barones o caciques electorales. A esos no les interesan los contratos para obras, sino los puestos para mantener la clientela. Y otros son, simples comerciantes, quienes, con raras excepciones, están en la política para sacar provecho legislativo para sus actividades privadas.
Que ahora no levante el dedo acusador el gobierno anterior, el de Uribe, porque estas mismas reuniones «importantes», con los mismos personajes, las sostuvo el expresidente en sus afanes electorales de sus dos campañas presidenciales (una para ser elegido en 2002 y otra para la reelección de 2006). Y, tras bambalinas se cuenta que en esas campañas metieron narices «empresarios» de la peor ralea.
Por lo tanto, falta lo sustancial de las relaciones del candidato-presidente, que es el compromiso real con las obras urgentes que requiere la región para que sea la punta de lanza de la globalización económica.
Y en ese sentido faltan líderes de la sociedad civil con fortaleza y economistas, columnistas, que tengan carácter y liderazgo para expresarle a Santos todo lo que presuntamente tienen en la cabeza sobre lo que le falta a la Costa Caribe en materia de infraestructura de toda índole para su desarrollo social, económico, cultural, agrícola y político. Esos personajes los hay, y de sobra. Pero no se atreven, no quieren, o no pueden convertirse en interlocutores válidos y protagonistas de la historia contemporánea costeña. Les hace falta un componente activo de la medicina moderna: testosterona.
Más seguridad

La jornada fue intensa y prolongada en el consejo de seguridad presidido por Santos. Foto: Javier Casella
En cuanto al Consejo de Seguridad, Santos señaló (hablando aún como Presidente de la República, titularidad que ostentará hasta el 7 de agosto), que “vamos a reforzar el número de policías en el departamento del Atlántico”, afirmó el mandatario, quien explicó que en los próximos 10 a 15 días «se incorporarán 150 agentes y que los otros 150 para un total de 300”.
El Jefe de Estado también anunció que en el municipio de Sabanalarga se activará el Gaula militar.
“Escuchamos que hay algunos problemas específicos sobre los cuales también vamos a actuar”, aseveró.
Al referirse a la captura de una banda de abigeos en jurisdicción de Polo Nuevo, expresó su confianza en que esa actividad delictiva disminuya.
El Mandatario puso de relieve la tarea desarrollada en el municipio de Galapa para reducir el consumo de drogas y subrayó que ello ha significado la reducción del microtráfico.
“Sobre este resultado le hemos dado instrucciones a la Policía para que dediquemos muchos más recursos a este programa para que esté presente en muchos más municipios, no solamente del Atlántico sino de todo el país”.
Al concluir el encuentro sobre Seguridad, el Presidente Santos anunció la adopción de un plan piloto para que Barranquilla sea cubierta por completo con cámaras de seguridad. Eso sí fue abrumadoramente aplaudido, no tanto por la misión de estas cámaras instaladas en puestos claves -qué tal tres cámaras en los sanguinarios Tres Postes de la 17, una camarita en cada poste para identificar a los atracadores y matones del barrio-. Se explica un poco más, los extensos aplausos no fue tanto por el anuncio presidencial, sino porque se trata de cámaras de seguridad y no cámaras reducidoras de velocidad, que le reporta multimillonarias ganancias al «Yuyo» Dáes y un excalcalde socio, que resultó más vivo que los Nule.
Al hacer el balance de las medidas adoptadas para fortalecer la seguridad, el mandatario de los colombianos afirmó que en Barranquilla la extorsión se ha reducido en 90%, tal como hoy lo reconocen transportadores, comerciantes, tenderos y voceros del sector privado que venían siendo afectados por este delito, al tiempo que destacó la colaboración entre las autoridades y la comunidad en el logro de este objetivo.