Ya es un hecho, el Congreso aprobó la ley que deshace la exigencia.
Por Gabriel Moncada Figueroa
Hoy cuando escuché la noticia fue un verdadero alivio, puesto que soy uno de los muchos colombianos que necesitaban la libreta militar para poder trabajar y de los muchos que creía que era algo ilógico seguir exigiendo. Mi historia respecto al caso da para otro artículo, pero lo realmente importante son los beneficiados que esta decisión traerá porque la cifra en el 2013 ascendía a más de medio millón de desempleados entre los 18 y 28 años, lo cual es alarmante para un país en desarrollo como el nuestro.
Con esto le abre las puertas a muchos jóvenes con deseos de superarse. Esta la Ley que busca promover el empleo y emprendimiento juvenil, establece que dicho documento debe ser pagado por el ciudadano en plazo máximo de 18 meses después del ingreso. Esto puede generar un debate, pero sin ser conformista pienso que por lo menos es una oportunidad que años atrás era impensable, lo que resta hacer es ahorrar para pagar la famosa y odiada libreta militar.
Como punto positivo para los empresarios que contraten a jóvenes, se les eximirá el pago de cajas de compensación que equivale al 4% de los salarios. El empleo en el sector público dejará de ser una odisea, puesto que para acceder a una práctica o pasantía era casi imposible debido a la tramitomanía interminable que había que hacer, ahora el proceso se simplificará gracias a que se creará una bolsa especializada para prácticas que será remunerada con el salario mínimo.
El presidente Juan Manual Santos se expresó mediante este tuit:
Y a su vez el senador Antonio Correa, asegura que “ni la falta de experiencia laboral, ni la libreta militar serán impedimentos para que los jóvenes del país puedan vincularse a un trabajo digno y formal. Puesto que la situación era un callejón sin salida en el que las empresa requieren experiencia laboral, pero no dan la oportunidad de obtenerla y la otra trampa era el de no tener resulta la situación militar, produciendo así más trabajadores informales y el aumento de la delincuencia.