El ganadero valduparense Ricardo Molina Araújo, se entregó este viernes a la Fiscalía y aportó el arma que, según él y algunos testigos, se le disparó en forma accidental.
Por Chachareros
Ricardo Molina Araujo, uno de los hijos menores que la difunta Consuelo Araujo Noguera tuvo con el también difunto Hernando Molina Céspedes, hirió gravemente con su pistola a su esposa Gildana Maestre Maya, quien se encuentra en una de las salas de cuidados intensivos en una de las clínicas de Valledupar.
Ricardo Molina declaró al entregarse a la Fiscalía que se encontraba limpiando su arma y en forma accidental se le disparó, saliendo la bala directa a la cabeza de su esposa. Sin embargo, algunos vecinos informaron a varios medios de comunicación que alcanzaron a escuchar una fuerte discusión entre la pareja, debido a que él llegó a las tres de la madrugada en avanzado estado de embriaguez. Una de las vecinas dijo haber escuchado cuando Gildana le gritaba: “¡cómo vendrás de borracho, que ni siquiera puedes mantenerte en pie”.
Las versiones señalan que la “discutidera se calmó, pero poco después se escuchó el disparo y el llanto desesperado de las dos hijas del matrimonio”. De inmediato la señora herida fue trasladada a la clínica y horas después Ricardo se entregó a la Fiscalía, alegando que fue un accidente casero.
El suceso causó enorme consternación en la sociedad de Valledupar, toda vez que se trata de familias respetables. La esposa de Ricardo es hermana del periodista y escritor Carlos Alberto Maestre Maya. Son parientes muy cercanos del exprocurador General de la República Edgardo Maya Villazón, el último esposo que tuvo la “Cacica” Consuelo Araújo, quien fue secuestrada y asesinada cobardemente por una columna de las Farc que operan en la serranía del Perijá, negociando coca con los narcotraficantes de todos los pelambres.