Ramsés Vargas Lamadrid, en su calidad de Rector y Presidente del Consejo Directivo de la Universidad Autónoma del Caribe, declara ante la comunidad universitaria y la opinión pública:
1) La Sala General de la Universidad Autónoma del Caribe no tiene entre sus funciones la de nombrar o encargar al Rector. Esta Sala, por otra parte, se rige para la toma de sus decisiones por unos protocolos estatutarios para sus sesiones ordinarias y extraordinarias, los cuales no se cumplieron para las supuestas reuniones del 15 de julio. Por lo tanto, el remitido publicado donde informan de unas decisiones supuestamente adoptadas sobre encargo de Rector no tiene el carácter oficial vinculante que le han atribuido, de buena fe, en algunos medios de opinión. Debe quedar claro que el órgano corporativo estatutario en la Universidad Autónoma del Caribe para el nombramiento de Rector es el Consejo Directivo, del cual hacen parte además de los miembros activos, representantes de los estudiantes, egresados y profesores y el cual para sus sesiones válidas debe ser convocado por el Rector. Este Consejo ha sido formalmente convocado para el 8 de agosto próximo.
2) Frente a los movimientos que han enturbiado la tranquilidad con la cual venía operando la Universidad en las últimas semanas, he recibido, entre ayer y hoy, manifestaciones de respaldo institucional por vía telefónica de la ministra de Educación, María Fernanda Campo, y de la viceministra de Educación Superior, Patricia Martínez, quienes dirigen las acciones de seguimiento, inspección y vigilancia que les son propias ante la Universidad Autónoma del Caribe. Mi registro como Rector está plenamente vigente y avalado por el Ministerio de Ecuación Nacional, luego, seguimos despachando como Rector en plenitud.
3) La Universidad Autónoma del Caribe no ha perdido el ritmo normal de actividades por los episodios de las últimas horas y cuenta con instituciones internas que le permiten superar su actual situación. Mi llamado es que continuemos desarrollando nuestra misión institucional y que se aclaren los malos entendidos en los medios de comunicación y en la opinión pública.
4) Los episodios de las últimas horas no variarán los objetivos de sostener en la Universidad los estándares de calidad en su docencia e investigación al tiempo que se corrigen errores de diversos niveles de gravedad que han sido detectados en las auditorias de gestión administrativa y financiera que han sido practicados en los últimos días. En la gestión rectoral bajo mi cargo son permanentes los criterios de transparencia, gerencia por resultados e institucionalidad. En legalidad y transparencia, no cederemos ni un ápice.
5) Debo expresar mis agradecimientos y los de mi familia por las expresiones de solidaridad y acompañamiento frente a los desafíos que imponen la ofensiva de quienes prefieren el estatus quo frente a los deberes de ser eficaces ante una crisis de diversos órdenes que tenemos que superar en la Universidad Autónoma del Caribe. Las organizaciones sindicales han cumplido sus deberes de proteger lo que es un bien colectivo. Las manifestaciones de alerta por las amenazas contra mi vida y la de miembros de mi familia son gratificantes y comprometedoras. Confío que las autoridades hagan su tarea.
6) Invito a toda la familia de la Uniautónoma a cerrar filas para superar la actual situación y seguir una ruta de transformaciones y progreso para bien de los estudiantes, profesores, personal administrativo, egresados y futuros vinculados. Desde luego, para bien de toda la sociedad y para que la Autónoma sea la Universidad que el Caribe necesita.