Jhon Jerlin Cifuentes Ramos es un profesional del volante, maneja un furgón de 16 toneladas por las carreteras de Colombia y hace parte de la lista de los veinte ganadores de la empresa Movistar que acompaña a la Selección Colombia de fútbol en todos los estadios.
Escrito Por Francisco Figueroa Turcios
Editor de Deportes
Trabaja en una empresa en el área de logística. Algunas veces le correspondía cubrir la ruta de Barranquilla para traer mercancías a supermercados, y productos químicos, materia prima para elaborar pinturas. Cuando pasaba por la circunvalar con Murillo y observaba el estadio ‘Metropolitano’, repetía la misma frase: «mi Dios me tiene que dar la oportunidad de algún día poder ver un partido de la Selección Colombia».
Un día iba en uno de los recorridos por las carreteras del país, escuchaba radio como siempre para para mantenerse bien informado y hacer menos tedioso esos largos viajes al frente de un camión, cuando de repente escuchó un comercial de la empresa Movistar donde anunciaban el concurso que premiaba a 20 colombianos por adquirir un plan o cambiar de plan. En voz alta dijo: «es mi oportunidad de ganarme uno de esos 20 premios. Cuando regrese a Palmira, Valle, cambio de plan celular. ¡Me llegó la hora de ver jugar a mi Selección Colombia!».
Jhon Jerlin continuó su jornada de trabajo y de su mente no se le quitaba la idea del concurso. Apenas llegó a su natal Palmira le contó a su esposa Gloria Ramos la historia del comercial, le pidió que la acompañara a las oficinas de la compañía de celulares para poder concursar.
«Mi esposa al principio no prestó mucha atención, me dijo que son estrategias de las empresas para vender, que eso era difícil de ganar, pero para quitarme la idea me acompañó».
Desde ahí estaba pendiente a la fecha del concurso, contaba los días que faltaban para que llegara el sorteo. Cada vez que me sonaba el celular pensaba que sería la llamada ganadora.
«Llegó la fecha, pasaban las horas y poco a poco iba perdiendo las esperanzas porque nadie me llamaba, ni siquiera mi mujer. Decidí colocar música para olvidarme del tema y concentrarme en manejar el camión para cumplir mi responsabilidad del trabajo. Ese día debía ir a Cali y Medellín».
A las cinco de la tarde por fin sonó el celular. Pensó que era su esposa, pero escuchó la voz de una señorita, detuvo la marcha del camión para no tener interferencia. La interlocutora le preguntó: ¿»usted es el señor Jhon Jelir Cifuentes Ramos». «Si», dijo él. Ella hizo una pausa y le anunció que era uno de los 20 ganadores que acompañaría a la Selección Colombia en toda la Eliminatoria al Mundial Brasil 2014.
«Solo atiné a decir: ‘señorita, ¿eso es cierto?’. Ella me dijo que sí y que debía pasar por las oficinas de Movistar a reclamar el premio. Es el viaje más rápido y feliz que he hecho en el camión».
Jhon Jerlin no dudó un segundo en llamar a su esposa y darle la tremenda noticia.»Mija nos vamos para Barranquilla y para los paises donde juegue Colombia».
El concurso ofrecia tiquetes, hospedaje, transporte interno y boletas para el ganador y un acompañante.
«Es una experiencia de vida inolvidable, que una persona como mi caso pueda acompañar a la Selección Colombia a todos los partidos de la Eliminatoria, con todo pago y hoteles de primera clase. Por ejemplo, para el partido ante Chile en Barranquilla nos vamos a hospedar en el hotel Estelar».
Jhon está haciendo un álbum fotográfico y de video para cuando sus hijos estén grandes (tiene dos Brayan, de dos 2 años; y Elvis, de 4 años) mostrarles esta experiencia y enseñarles a creer en los sueños.
Al Mundial
Jhon Jerlin, como los 47 millones de colombianos, confían en que Colombia rubrique su paso al Mundial Brasil 2014 ante Chile en el estadio Metropolitano.
«De esta experiencia lo más importante es que mañana yo puedo sacar pecho diciendo que acompañé a la Selección Colombia en la ruta para lograr la clasificación». Ahora toda la gente en Palmira busca al morocho del camión para que les cuente cada detalle de los viajes, porque ha ido con Movistar desde Barranquilla a la Patagonia detrás de su Selección. Se rie de la emoción y finaliza diciendo: «ahora soy más importante que el propio Alcalde».