La Fiscalía General llamará a rendir entrevista a la ministra de Educación Gina Parody y a la senadora por el partido Verde Claudia López para que amplíen sus denuncias ante supuestas amenazas en su contra difundidas por Twitter. El Gobierno y el país se ha solidarizado con ellas.
Lexander Loaiza Figueroa @Lexloaiza
Cuando Omar Mateen ingresó a la discoteca `Pulse’ la madrugada del pasado domingo con la intención de asesinar a la mayor cantidad de gente posible, estaba claro que su accionar dejaría una profunda huella en la conciencia de todo el mundo, por el rechazo generalizado a la masacre que ocasionó y al profundo dolor y tristeza en una ciudad que es uno de los principales destinos turísticos de Estados Unidos.
Pero las repercusiones que se han desatado desde entonces, muy difícilmente las imaginaría este ciudadano estadounidense de origen afgano. Disney, cuyos parques en Orlando son visitados por millones de turistas de todo el mundo cada año, anunció que reforzó su seguridad ante la incertidumbre dejada por Mateen tras asesinar a 49 personas y herir a otras 53. Gobiernos de distintos países y movimientos por los Derechos Humanos también se han pronunciado condenando el atentado.
En Colombia la polémica sobre la masacre se ha centrado esta semana en las amenazas proferidas a través de Twitter contra la ministra de Educación Gina Parody y la senadora por el Partido Verde, Claudia López.
Un usuario identificado como @Joey Spardy trinó que había soñado con los cuerpos de las dos señoras yaciendo en el club ‘Pulse’ de Orlando, en clara alusión al ataque armado.
Como era de suponerse, el mensaje desató reacciones negativas comenzando por las propias aludidas, dirigentes políticos, movimientos sociales y hasta el propio Gobierno nacional, que en la persona del ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, dijo que eran actitudes que generaban violencia y discriminación, comportamientos que calificó de “intolerables”.
Aunque Twitter ya cerró la cuenta del usuario por violar sus normas contra los mensajes discriminatorios y amenazantes, la Fiscalía General anunció que llamará a entrevista a las dirigentes políticas para que amplíen sus denuncias en torno a lo ocurrido.
También fueron impartidas órdenes de Policía Judicial con el objetivo de rastrear la dirección de IP desde la que fueron lanzadas las amenazas contra Parody y López.
El coordinador del equipo de género y enfoque diferencial de la Fiscalía, Mauricio Noguera, informó a la cadena radial RCN, que en este caso se investiga, en un principio, el delito de amenazas que contempla una pena de hasta 4 años de prisión. Si se encuentran méritos suficientes habrá imputación de cargos.
Para muchos la conclusión para rechazar este tipo de expresiones radica en el hecho de que la sociedad colombiana ha tenido que pagar muy caro por la intolerancia, tras casi seis décadas de conflicto armado. Ahora cuando se habla de una paz que apenas comienza a delinearse, también con un alto costo, es inaceptable que conductas fundamentalistas vengan a amargar nuestra convivencia como país.