Oslo / Caracas, 10 de octubre de 2025. — El Comité Noruego del Nobel otorgó el Premio Nobel de la Paz 2025 a la líder opositora venezolana María Corina Machado, en reconocimiento a su papel en la defensa de los derechos democráticos y su esfuerzo por impulsar una transición pacífica hacia la democracia en Venezuela, pese a la persecución política que enfrenta.
“María Corina Machado ha mantenido encendida la llama de la democracia frente a una oscuridad creciente”, afirmó el Comité Noruego del Nobel al anunciar el galardón. La decisión reconoce su liderazgo como una de las voces más firmes contra el autoritarismo y su empeño en promover “votos en vez de balas”, lema que ha marcado su carrera.
¿Quién es María Corina Machado?
Nacida en Caracas en 1967, María Corina Machado es ingeniera industrial egresada de la Universidad Católica Andrés Bello. En 2002 fundó Súmate, una organización ciudadana dedicada a promover la participación política, la transparencia electoral y la vigilancia de los procesos democráticos.
Su irrupción en la vida pública la convirtió rápidamente en una figura emblemática de la oposición venezolana. Fue diputada a la Asamblea Nacional y candidata presidencial, destacándose por su discurso firme a favor de las libertades civiles, el Estado de derecho y la restitución de las instituciones democráticas.
En los últimos años, Machado se consolidó como líder de la principal coalición opositora, pese a haber sido inhabilitada políticamente y perseguida por el régimen de Nicolás Maduro. Desde las elecciones de 2024, cuyos resultados fueron ampliamente cuestionados por la comunidad internacional, se encuentra en la clandestinidad.
Un premio a la democracia
Durante el anuncio, Jørgen Watne Frydnes, presidente del Comité Noruego del Nobel, subrayó que Machado “ha cohesionado a la oposición de su país, ha resistido la militarización de la sociedad venezolana y ha defendido una transición pacífica y justa”.
El Comité destacó que el premio se otorga “a la persona que haya realizado el mayor o mejor trabajo en favor de la fraternidad entre las naciones y la promoción de la paz”, tal como lo establece el testamento de Alfred Nobel.
Machado, sorprendida por la noticia en la madrugada, expresó:
“Esto es un movimiento, un logro de toda una sociedad. Yo solo soy una persona. Ciertamente no merezco esto”, dijo entre lágrimas tras recibir la llamada del Comité Nobel.
La galardonada podría no asistir a la ceremonia de entrega, programada para diciembre en Oslo, debido a razones de seguridad. “Es demasiado pronto para decirlo. Esta es una situación delicada”, precisó Frydnes.
Reacciones internacionales
Para Nina Græger, directora del Instituto de Investigación para la Paz de Oslo (PRIO), este reconocimiento “es ante todo un premio a la democracia”.
“En un momento en que el autoritarismo está en auge en todo el mundo, este premio destaca la valentía de quienes defienden la libertad con votos, no con balas”, declaró a CNN.
De igual forma, Karim Haggag, director del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI), señaló que el galardón “subraya la preocupación del Comité Nobel por el retroceso global de los valores democráticos”.
El año pasado, el Premio Nobel de la Paz fue concedido a la organización japonesa Nihon Hidankyo, compuesta por sobrevivientes de la bomba atómica, en un contexto marcado por las tensiones nucleares globales.
Una líder símbolo de resistencia civil
A lo largo de más de dos décadas, María Corina Machado se ha convertido en símbolo de resistencia civil en América Latina, representando una lucha no violenta por el cambio político.
Su mensaje, enfocado en la reconstrucción institucional y el poder del voto, ha inspirado movimientos ciudadanos dentro y fuera de Venezuela.
El Comité Noruego del Nobel calificó su trayectoria como “uno de los ejemplos más extraordinarios de valentía civil en tiempos recientes”.










