A juzgar por las insinuaciones de dirigentes empresariales del interior, el Caribe es la zona que más consume y es la que más debe ahorrar.
Por Rafael Sarmiento Coley
Alertados por colegas que tienen redes de intercambio de información y por las redes sociales que trinan de la rabia por la situación, se ha conocido que un grupo de empresario le estaría insinuando al Gobierno Central que intensifique una campaña pedagógica en la Costa Caribe porque es la región que más desperdicia energía eléctrica.
María Lorena Gutiérrez Botero, Minminas encargada.
Es al revés, señores empresarios. Donde están las grandes factorías que consumen el mayor número de kilovatios-hora es en Antioquia, Valle del Cauca y el Altiplano Cundiboyacense.
Se tiene el estigma del alto consumo en la Costa por los insoportables calores que con frecuencia castigan al habitante costeño. Lo mismo que la ola de mosquitos que con sus ataques arteros nocturnos no dejan dormir a nadie. Para infortunio de los malquerientes empresarios que hacen el papel en estos tiempos de ‘Señores Oidores’, en la Costa de un tiempo largo a esta parte se disfruta de una brisa helada que, como nunca, refresca nuestras vida y destierra irremediablemente cuanto mosquito hay por algún rincón. Como diría la difunta Olga Emiliani, por ese lado tacaron burro.
El colega periodista Tadeo Martínez, muy estudioso del sector eléctrico, nos explica que prácticamente “se robaron $18 billones del cargo de confiabilidad o seguro contra el apagón y ni Santos, ni MinMinas, ni la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), ni MinHacienda dicen qué hicieron con esa plata. El senador del Polo Democrático Jorge Robledo dice que esa plata se fue a Islas Caimán. Pero como es del Polo, la aplican la campana neumática para que no suene ni truene ni trine en los medios ni en las redes mediáticas. …. Y ahora la Costa es la que debe ahorrar según la ministra de las almendras descabeza periodistas”.
Por falta de mantenimiento oportuno, el sistema energético en la Costa poco menos que colapsó.
Lo peor de todo, según el periodista Tadeo Martínez es que ahora el gerente de Gecelca, Andrés Yabrudy, quien siempre ha contado con el respaldo del sector político de los Name, está sonando para Ministro de Minas.
En este caso lo estaría impulsando el senador José David Name Cardozo, de la mesa central de la U, y muy allegado al presidente Juan Manuel Santos.
El caso de Yabrudy es peculiar. En esencia, fue el encargado de darle entierro de pobre a la descuartizada Corelca, una empresa que fue modelo, pujante, punto de integración costeña, y principal impulsora de los mejores proyectos que han cristalizado en esta región.
Pero llegaron los politiqueros a repartírsela a pedazos. La volvieron añicos. Robaron hasta el hartazgo. Y, cuando ya no quedaba nada, decidieron dividirla en empresas sin músculo financiero ni futuro comercial.
Y ahora nos quieren cobrar las negligencias de todo el sistema energético nacional.
Una de esas divisiones fue Transelca, en cuya gerencia está Guido Nule desde su fundación. Esta parte desprendida de lo que era Corelca se encarga de las líneas de alta transmisión. Y Genselca, la generadora de energía con muy poca capacidad de generación y un gerente que se quemó en un cargo en donde ha pasado los mejores años de su juventud sin poder brillar ni mostrar un resultado efectivo.
Volviendo al caso de los misteriosos 18 billones de pesos, todo parece indicar que se quedaron en los bolsillos de térmicas, hidroeléctricas, Creg, ministros, superintendentes “que no supervisaron un carajo”.
En teoría de Tadeo Martínez, quien encarece la factura en nuestro recibo es el mezquino criterio con que los antioqueños, dueños absolutos del sistema eléctrico nacional repartieron las cargas: pagamos hoy 425,66 pesos por kilovatio hora, eso va para distintas fuentes. La primera y la más cara: los generadores paisas de las hidroeléctricas y la ineficiente Gecelca se queda con 196,26 pesos por kilovatio hora. Para peor desgracia, las térmicas de Geselca han estado fuera de servicio.
