Ese día está prevista una sesión de la Corte Suprema donde se discutirá la pertinencia de esta obligación aplicada a las empresas trasnacionales que explotan recursos naturales. Una barranquillera nos dice que harán plantón y una ‘marcha carnaval’ para protestar por el ambiente y los derechos humanos.
Lexander Loaiza Figueroa @Lexloaiza
Esmeralda Guerra es una barranquillera con más de 35 años en Bogotá. Allí ha emprendido desde hace mucho una lucha por la defensa del medio ambiente y por los derechos humanos “porque los derechos humanos lo encierran todo”, dice en el marco de la entrevista que concedió a Lacháchara.co.
Esta lucha la ha llevado a ocupar hoy un puesto en la Mesa Ambiental de Bogotá por la defensa de los cerros orientales, cuyos espacios han sido continuamente vulnerados por la permanente urbanización de sus veredas, a pesar de las limitaciones legales existentes.

La explotación minera no sostenible con el medio ambiente ha originado reiteradas protestas en el país.
Y es esta empatía con el tema la que también la ha conducido a vincularse permanentemente con las luchas ambientales no solo en la capital de la República, sino también en distintas partes del país.
“El próximo 12 de abril se llevará a cabo en la sede de la Corte Suprema una sesión especial donde se examinará la aplicación de las consultas populares”, dice Guerra a Lacháchara.co. Explica que entre los movimientos ambientales del país manejan la información y se ha generado el temor de que esta sesión pueda ser el preámbulo para una eventual derogación de este derecho que tienen las personas que habitan las zonas sujetas a explotación de sus recursos naturales.
“Ese día a partir de las 10:00 de la mañana los movimientos ambientales del país vamos a protagonizar un plantón frente a la sede del Palacio de Justicia a fin de hacer sentir nuestra posición al respecto”, informó.

La ONU admitió una demanda introducida contra la explotación de oro en la zona de La Colosa, en Tolima.
La acción de calle, va a denunciar además “las reiteradas violaciones de los derechos humanos de los líderes sociales y ambientalistas, las políticas extractivistas planteadas por el Gobierno Nacional y la situación ambiental que vive el país”.
Marcha Carnaval
Al día siguiente, el viernes 13 de abril a partir de las 4:00 de la tarde, estos grupos ambientales acompañados de otras organizaciones civiles tales como compañías teatrales, de teatro callejero, comparsas, clown, performance, danza, música, b-boys y demás manifestaciones artísticas urbanas; así como colectivos ambientales, sociales y cívicos, mesas de trabajo frente a la conservación de los recursos naturales, líderes comunitarios, estudiantes, artesanos, campesinos, profesionales, mujeres niños, personas de discapacidad, religiosos y a la ciudadanía en general a los cuales han hecho llegar una invitación; realizarán la llamada ‘marcha carnaval’.
Sobre ello Esmeralda Guerra nos explica que dicha actividad, que comenzará en el llamado ‘eje ambiental’ de Bogotá, en pleno casco central de la capital, coincidirá con la presentación de un informe que hará en ese mismo momento en Ginebra, Suiza; la colombiana Julia Margarita Bautista Polanía, sobre el caso de La Colosa, jurisdicción del departamento de Tolima, que habla sobre explotación indebida de los recursos naturales y afectación del entorno ambiental en detrimento de la calidad de vida de los habitantes de esa región.
Bautista Polanía tendrá que sustentar ese día el informe presentado previamente ante el Grupo de Trabajo del Examen Periódico Universal (EPU) de la Organización de las Naciones Unidas, y que habla de la explotación a su juicio irregular, que estaría perpetrando una empresa trasnacional minera en la mencionada región tolimense. Dicho documento sustrae información facilitada por el Comité Ambiental en Defensa de la Vida del Tolima y la Familia Franciscana de Colombia.
Según un comunicado de prensa que facilitó Esmeralda Guerra, se está formulando una invitación para que se realice una toma similar simultáneamente en las regiones donde “el extractivismo está afectando al territorio y la vida en sus componentes bióticos y no bióticos”.
“El fin de visibilizar y acompañar las problemáticas relacionadas con el extractivismo minero energético y la agroindustria por las diferentes multinacionales en diversas regiones de Colombia”, explica Guerra.