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Sacerdote Julio Balza, otra víctima de Covid

Durante 8 años fue el párroco de la Iglesia de la Divina Misericordia en los sectores de El Limoncito, Villas del Limoncito y Villa Carolina.

Por Chachareros

El sacerdote Julio Balza Tatis, durante su desempeño en la iglesia de la Divina Misericordia se ganó el cariño y el respeto de una vasta feligresía del norte de Barranquilla.

Luego de una lucha tenaz contra el Coronavirus, el joven sacerdote barranquillero Julio Balza Tatis fue derrotado por tan cruel virus.

Nacido el 19 de febrero de 1972, su vida en el sacerdocio fue de verdadero ejemplo de humildad y devoción, lo que le permitió granjearse el cariño, el respeto y la admiración de la feligresía, en donde quiera estuvo.

Con apenas 42 años, la iglesia católica pierde a uno de sus más fogosos predicadores de la palabra de Dios desde el púlpito. Fue a Roma, en donde tuvo la oportunidad de ser recibido por el Sumo Pontífice.

Siempre alegre, entusiasta, de palabra fácil y amiguero, Julio Balza tuvo una infancia dura al lado de su progenitora, Alicia Tatis, quien falleció hace cuatro años, lo cual le produjo un hondo pesar, pues ella era parte esencial de su vida. Habían transitado por este mundo cogidos de la mano.

Las misas del sacerdote Julio Balza eran una fiesta religiosa, con una comunidad gozosa por las ocurrencias del joven sacerdote. Foto Nira Figueroa Turcios.

El padre Julio Balza fue uno de los párrocos de más largo periodo en la iglesia de la Divina Misericordia, ocho años continuos. Llegó a reemplazar al padre Julio Márquez, quien con anterioridad reemplazó al padre Ariel Ávila, otro de los sacerdotes muy queridos y recordados por la feligresía de esta vasta zona religiosa.

De la iglesia de la Divina Misericordia el padre Julio Balza Tatis hace un par de años fue trasladado a la parroquia de los 12 Apóstoles en el barrio La Unión, en el suroccidente de Barranquilla.

La familia de www.lachachara.co hace llegar su voz de condolencia a todos los familiares, amigos y feligresía del sacerdote julio Balza Tatis. Paz en su tumba.

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