Por: Manuel J. Anaya Acosta – Talento Onda Juvenil
Faltó más tranquilidad, equivocamos los caminos. Esa fue la apreciación del DT Julio Comesaña sobre lo que fue el juego de ida de la final de la Liga Águila. Fue un partido muy cerrado, en la que el orden táctico fue mejor aplicado por América que juntó las líneas de defensa y mediocampo con un 4-5-1 y mucha ocupación de la zona media, lo que impidió que Junior desarrollara su juego característico. Este planteamiento de América hizo que los jugadores de Junior se desesperan y buscaran vulnerar la valla de Volpi de una manera desordenada lo que molestó al DT que frecuentemente le llamó la atención a ‘Cariaco’ y a Cetré por excederse en el juego individual.
El partido tuvo un marco espectacular, el estadio estuvo completamente lleno, aunque las boletas misteriosamente se acabaron en menos de 15 minutos en los puntos de venta, y por redes sociales se vió que algunos pocos tenían paquetes de más de cien boletas para revenderlas a precios exorbitantes, superando en casos el 100% de sobrecosto. Esa mafia de los revendedores y tuboleta dejaron a muchos hinchas como yo, incluso abonados sin la posibilidad de ver el partido en el estadio. A pesar de que el metropolitano estuvo repleto, después de los himnos la gente se desapareció, nunca más se notaron, ni siquiera en el sector de los barristas. Se la pasaron sentados con la cara larga, no alentaron, no presionaron al rival, parece que hubieran jugado a puerta cerrada; más alienta una porra de colegiales y, me atrevo a afirmar, que la insipidez de los que estuvieron en el estadio contagió al equipo.
El primer tiempo inició con un Junior vertiginoso que buscó aprovechar los primeros minutos para anotar, pero no tuvieron la profundidad y la precisión para marcar el gol. Después de los 15 minutos, Junior manejó el balón, lo fue rotando de un extremo a otro y por momentos Teófilo se juntaba con Sandoval y González para generar jugadas de alta factura, con pases a un toque, lo que desequilibró la línea de volantes pero, nuevamente, no pudieron llegar a definir. Lo más cercano del gol que estuvo Junior fue un gol de cabeza de Teo que fue invalidado por regresar de posición adelantada. América tuvo sus opciones, algunos remates tenues, un tiro libre de Carrascal que buscaba el ángulo y Viera salvó y la más clara, una jugada individual de Michael Rangel, que hizo una de más y fue neutralizado por Gabriel Fuentes.
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Tomado de elheraldo.co[/caption]
La segunda mitad fue similar, América siguió con el muro atravesado y Junior no logró descifrar la clave para llegar al gol; aunque por momentos Junior apeló a la presión en el tercer cuarto de cancha, forzando al error de los escarlatas y filtrar balones por los costados, sobretodo el izquierdo, en el que Cetré ganó la mayoría de los duelos. Las jugadas de ataque fueron mínimas, los jugadores no se animaron a probar de media distancia para aprovechar que América estaba todo echado atrás. Igual que en la primera parte del partido, los diablos rojos se asomaron por el arco defendido por Sebastián Viera, pero el uruguayo se colocó la capa y controló las llegadas del rival.
Se sabía que era una final con pronóstico reservado, que sería una serie complicada y que cualquier cosa puede pasar. La habitual paridera a la que estamos acostumbrados no brillará por su ausencia, no será la excepción. El partido en Cali no creo que sea muy diferente al juego de anoche, los equipos mantendrán un orden táctico y se examinarán durante los primeros minutos; eso sí, América no mantendrá sus líneas muy juntas, pero tampoco se jugarán todo al ataque al inicio del juego porque no les conviene darle espacio a Junior.
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Tomado de elheraldo.co[/caption]
Yo no me bajo del bus, la serie está más que viva y sé que los jugadores darán lo mejor de sí a pesar de la presión que ejercerá la hinchada escarlata que hace del Pascual una plaza dura, pero Junior ya ha jugado con estadio en contra antes. De los 9 títulos de los tiburones 7 se consiguieron de visitante, incluyendo los dos últimos, con la mayoría de jugadores que están hoy. Muchos periodistas del interior del país otra vez arremeten contra Junior con sus comentarios, después del partido dan por sentado que América será el campeón, cosa que me da más confianza en el equipo porque les gusta callar bocas, lo vimos en las dos finales pasadas y de eso también escribí en su momento (https://lachachara.org/2019/06/los-comentarios-de-odio-y-periodismo-malintencionado-que-despierta-junior-al-estar-en-una-final/).
La fe está intacta y la serie abierta, apoyemos al equipo, hagámosle saber que estamos con ellos y les enviaremos la mejor de las energías. El partido de vuelta será el próximo sábado 7 de diciembre a las 16:00 horas, así que a disfrutar con la familia y los amigos este partido, reúnanse a verlo compartiendo comida y bebida, hagamos de la fiesta de las velitas un día especial, disfrutando en paz y, si Dios mediante ganamos la décima, festejemos en paz.]]>
