El 17 de diciembre de 1980, Junior obtuvo el segundo título en el fútbol profesional colombiano.
Por: Francisco Figueroa Turcios
Carlos Molinares,delantero juniorista
La historia de la segunda estrella que esta en el firmamento de la historia de Junior, Carlos Molinares tiene como a uno de sus principales protagonistas: marcó el gol que fue determinante para que el Junior se repusiera del marcador adverso (0-2) ante el Deportivo Cali en el estadio ´Pascual Guerrero´.
De los 12 goles que Carlos Molinares anotó con el Junior en la temporada de 1980, sin duda que el gol más importante fue el que le hizo al Deportivo Cali el 17 de Diciembre, en el estadio «Pascual Guerrero», que marcó el sendero para que el cuadro ‘Tiburón’ alcanzara el segundo titulo, lo cual significó para él convertirse en un referente histórico del cuadro rojiblanco.
El empate le bastaba al Junior para coronarse campeón anticipado, pero la derrota lo obligaba a ganarle en la última fecha del cuadrangular final al Atlético Nacional, una instancia a la que José Varacka no quería llegar.
´´Edgar Perea, fue nuestro gran aliado en la temporada 1980. Con el micrófono era muy eufórico, y puso de moda la frase “a Junior tienes que matarlo, a Junior tienes que matarlo”. Gracias a él a respetaban en muchos estadios de Colombia.
Deportivo Cali se puso en ventaja a los 6 minutos por intermedio de Willington Ortíz quien ejecutó tiro penal, que le habían cometido a él mismo por intermedio de Dulio Miranda. El árbitro español Manuel Fandoz, decretó a los 35 minutos otro tiro penal, nuevamente por falta cometida por Miranda contra Willington Ortíz. El propio Ortíz, ejecutó el cobro de la pena máxima para decretar el 2-0, resultado con el que terminó el primer tiempo.
Carlos Molines, Édgar Perea Arias y Fernando Fiorillo
Para el segundo tiempo, el técnico José Varacka ordenó el ingreso de Carlos Molinares por Bonifacio Martínez y el de Fernando Fiorillo por Carlos Alberto De la Torres.
Carlos Molinares reconoce que, tanto su entrada, como la de Fernando Fiorillo, fueron influyentes en la vigorosa reacción del Junior, pero cita algo que, en su opinión, fue más determinante para empatar el partido y coronarse campeón: controlar a Willington Ortiz, quien en el primer tiempo les había hecho la fiesta y había marcado, de pena máxima, los dos goles del Deportivo Cali.
Fernando Fiorillo, recuerda que el técnico José Varacka le hizo énfasis a él y a Carlos Molinares que tenían la misión de cambiarle la dinámica al partido y que debíamos ejercer presión para que el Deportivo Cali no saliera de atrás con la facilidad que lo hizo en el primer tiempo…Eran la gran oportunidad de nuestras vidas para ser cambiarle la historia al juego y lograr el objetivo de ganar el título en forma anticipada».
Los cambios surtieron efecto. Junior fue otro equipo en la cancha. Metió en su propio campo al Deportivo Cali y empezó a generar jugadas de gol. La insistencia de Junior dio sus frutos en el minuto 71 cuando una jugada elaborada por Omar Alfredo Galván, Juan Miguel Tutino y Ariel Valenciano la concluyó Carlos Molinares con un zapatazo que no pudo contener el arquero Carlos Valencia. Allí renació la esperanza de conquistar la segunda estrella, que se materializó minutos después con el gol de Gabriel Berdugo.
Carlos Molinares, referente de Junior
«El gol que le anoté al Cali, sin duda que fue el más importante en mi carrera futbolística con el Junior. Lo guardo en mis gratos recuerdos de mi vida y cuando le muestro el video a mis hijos de ese partido me lleno de emoción. Parece que fuera hoy, Perdíamos dos a cero, Cali se hacia el campeón.
Al minuto 71, Omar Alfredo Galván, Juan Miguel Tutino y Ariel Valenciano, hilvanaron una buena combinación que pude concluir desde unos treinta metros cuando remate con todas mis fuerzas, con la convicción de que podía anotar y gracias a Dios logré el gol del descuento. Con el empate eramos campeones. Mi gol sirvió para motivar a todo el equipo y al mismo tiempo crear la inseguridad en los vallunos. Gabriel Berdugo marcó el empate y todo fue felicidad. Un momento inolvidable», al culminar el relato Carlos Molinares sobre la acción del gol histórico que le marcó al Deportivo Cali.
Carlos Molinares, era un diminuto puntero derecho que burlaba a sus rivales con base a la velocidad y a gambetas cortas y sorpresivas, con una cabellera larga que emulaba al exfutbolista argentino Ramón ‘Ratón’ Ayala.
Quienes lo reconocen le dan una palmadita y le dicen: «viejo Moli, te acuerdas del gol que le marcaste al Cali y que abrió la ruta del título, cuando perdíamos dos a cero ante el cuadro ‘azucarero’ y al final empatamos a dos goles.
Fernando Fiorillo, Carlos Molinares. Oscar Bolaño, Rafa Reyes y Jopa Berdugo
Mis mejores años los tuve cuando inicié en Junior a los 17 años, porque al llegar al club me encontré con Julio Comesaña, Dulio Miranda, Oscar Bolaño y Toto Rubio, jugadores que ya me llevaban unos 10 años en el profesionalismo. Y bueno… al lado de ellos aprendí y en su momento fuimos grandes.
Jugábamos por amor al fútbol y en mi caso al Junior. Para uno era un honor jugar en el Junior. El afecto de la afición era el mejor alimento espiritual para uno. Cada vez que hacen la reseña de los títulos es un orgullo aparecer en la foto del año 8O, cuando logramos el segundo título. Teníamos una excelente nómina. Recuerdo de memoria a mis compañeros: Juan Carlos Delménico, Jesús ‘Toto’ Rubio, Dulio Miranda, Gabriel ‘Jopa’ Berdugo, Oscar Bolaño, Omar Alfredo Galván, Juan Miguel Tutino, Carlos Alberto De la Torre, Rafael Reyes, Wulfrand ‘El Campero’ Cervantes, Bonifacio Martínez, Miguel Ángel Converti, Fernando Fiorillo y Óscar Fornari. Los ojos de Carlos Molinares vuelven a brillar, cuando retrocede el casette del partido en Cali, donde Junior obtuvo el segundo título en la historia del fútbol colombiano.
