Leonor Buitrago de Jaramillo Q.E.P.D[/caption]
Pertenecientes a la alta sociedad barranquillera, manejaron sus vidas con un bajo perfil y con una discreción absoluta.
Practicaban lo que ordena la Biblia: “que tu mano izquierda no sepa lo que hace tu mano derecha».
Un matrimonio para que sea feliz tiene que identificarse el hombre y la mujer de manera plena y sincera. Eso fue, exactamente, lo que hicieron en vida Álvaro Jaramillo Vengoechea y Leonor Buitrago de Jaramillo.
Ambos supieron manejar siempre un bajo perfil, con un manejo discreto de sus vidas, sin ostentaciones ni demostración de poder.
Álvaro Jaramillo fue siempre un hombre de entera confianza del grupo Santo Domingo. Y como tal, tenía asiento principal en todas las juntas directivas importantes de todas las empresas del clan empresarial.
Además, como uno de los gestores de la creación de la Universidad del Norte, la que con sus ideales y postulados ha llegado a convertirse en el principal centro universitario de la Región Caribe y una de las mejores del país. Juan José sostiene que su padre fue ejemplo de prudencia, de nobleza y honradez”.
Juan José ha sido presidente de Avianca, Concejal de Barranquilla y ahora figura como candidato a la Cámara por el grupo que orienta el senador Fuad Char, quien en esta ocasión lleva como aspirante al Senado a su hijo Arturo Char Chaljud.
En cuanto a su progenitora Leonor Buitrago de Jaramillo, su hijo Juan José dice que fue “ángel, motor y guía en nuestra formación espiritual y nos enseñó el valor de la caridad pública”.
Por eso los obituarios de los principales medios que conocieron de cerca la pareja conformada por Álvaro Jaramillo y Leonor Buitrago, como El Heraldo, destacaron “con profundo dolor registramos hoy la noticia del sensible fallecimiento en Barranquilla de la señora Leonor Buitrago de Jaramillo.
“Será recordada como una mujer muy expresiva y amorosa, alegre, de gran espíritu y de carácter fuerte, devota de Dios y dedicada en los últimos años al servicio de la comunidad mediante su vinculación a la Acción Católica. Fue una incansable voluntaria de la fundación Ayudemos, donde se dedicó con esmero a luchar por los niños más necesitados.
“ Madre ejemplar, preocupada por mantener unida a su familia, que hoy la recuerdan como una maravillosa mujer que formó un hogar ejemplar al lado de su fallecido esposo Álvaro Jaramillo Vengoechea, a quien siempre apoyó y siguió en todos sus proyectos, siendo su compañera incondicional».
Por tan sensible pérdida están recibiendo condolencias sus hijos Álvaro, Clarita, Luis, Nancy, Fernando, Leonor, Ana Lucía, Juan José, Maricel, Alberto Mario, así como sus nietos –entre ellos la recordada reina del Carnaval Andrea Jaramillo Char– y demás familiares”.
]]>
