Por eso su posesión será en El Bosque, en el underground barranquillero, en donde están los líderes que lo ayudarán en la difícil tarea.
Por Rafael Sarmiento Coley
Alex Char dedicará buena parte de sus esfuerzos en esta segunda oportunidad que le da la vida de ocupar la Alcaldía de Barranquilla, a trabajar por esos 860 mil habitantes de la ciudad, aproximadamente, que viven por debajo de los niveles económicos dignos.
Alex Char y Eduardo Verano, los triunfadores del 25 de octubre asumen este viernes.
Aunque los esfuerzos en los últimos 8 años han sido enormes (tanto en la primera administración de Char como en la que finaliza este 31 de diciembre de Elsa Noguera), no han sido suficientes para contrarrestar los niveles de pobreza y de pobreza absoluta. Con el agravante de que Barranquilla es punto de atracción para damnificados por el invierno de otros departamentos, desplazados por la violencia de los grupos armados al margen de la ley y los desterrados de sus parcelas por terratenientes brutales.
Por eso nunca el censo oficial de Barranquilla será real. En la ciudad hay gente invisible. Esas personas no pasan por los formularios complicados de los censores, que al final de su tarea, entregan cifras falsas y mentirosas de la población real de una ciudad que está por encima de los dos millones.
La guardia pretoriana
¿Cómo lo hará? Ese es el secreto mejor guardado de Char y su guardia pretoriana conformada por Jaime Pumarejo Heings, el terrible Vitico Mendoza Nicolella, el hombre que maneja las emisoras Olímpicas Miguelito Char, El ‘Pechichoncito’ Héctor Amaris, el ‘Oso Hormiguero’ Miguel Lozano Ariza, el hombre de ‘la maldad en pasta’ Rafael Pineda Badel, y en un segundo plano Ricardo Villa y la supersónica Diana Acosta, manejando las comunicaciones.
Char arranca con medio equipo que viene del gobierno de Elsa Noguera. Entre otros, el director de deportes Joao Herrera Olaya; en salud Alma Solano; en Hacienda Raúl Lacouture; en Foro Hídrico Alberto Salah; en Edubar Ramón Tomás Vides, y en comunicaciones Diana Acosta.
Las caras nuevas en los carros oficiales de la Alcaldía serán: Fernando Izasa en Movilidad (reemplaza a Lucho Pulido); Yesid Turbay en el Fondo de Seguridad; Juan José Jaramillo, Secretario de Cultura; Karen Abudinen en la Secretaría de Educación (es una magnífica adquisición, hablando en términos deportivos, pues viene del Fondo para la Infancia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar. Y como secretario Privado Miguel Lozano Ariza, periodista de larga experiencia, quien engaña por su apariencia de ‘perro flojo’ pero es más piloso que cualquier politólogo.
La posesión será este viernes primero de enero a las cuatro de la tarde detrás de la Cárcel de El Bosque. Estará acompañado del Vicepresidente de la República German Vargas Lleras; de su familia, su esposa Katya Nule de Char; su padre el exsenador Fuad Char y su esposa María Mercedes De la Espriella de Char; su hermano el Senador Arturo Char, y otros invitados especiales.
Las reuniones bajo el palo de mango
Alex Char ha realizado el curso completo en el poder local. Primero fue Concejal, siendo muy joven, y cuando apenas contaba con un pequeño grupo de amigos (entre otras cosas ninguno de los miembros de su actual sanedrín). Las reuniones eran debajo de un palo de manco en el patio de una casa desocupada de una hermana de uno de los hijos de Chelo de Castro. Realmente aquellas reuniones parecían encuentros clandestinos de un grupo trosckista. Muy reducidas en asistencia, pero verdaderos amigos de Alex Char, que él fue dejando por el camino como cuando se desprende el arriero de la carga que le sobra.
La posesión de Eduardo Verano tiene ribetes de consagración y juramento ante María Reina.
Realizó un buen trabajo proselitista, especialmente con los trabajadores de las empresas de la familia y con sectores populares.
Ganó holgadamente, pero, apenas llegó al Concejo se dio cuenta que estaba en el lugar equivocado. Mucha tramoya, mucho acuerdo por debajo de la mesa, traiciones al por mayor, paraban los debates para extorsionar al Alcalde de turno. En fin, él entendió que tenía que volar de allí cuanto antes.
No terminó el periodo y se lanzó para la Gobernación del Atlántico en un apretado duelo con el radioperiodista Ventura Díaz Mejía. Fue un debate tan duro, que hasta una denuncia por difamación y calumnia se ganó, cuando le dijo a Ventura que no se dejaría ganar “de ese pelo e´burra”. Ante una fiscal de Soledad Ventura demandó a Alex Char por difamación por haberlo llamado pelo de burra, debido a su cabeza canosa, en plena plaza pública. Tal vez Ventura hubiera aceptado que lo mencionara por su apodo familiar, ‘Caimán Parao’. Pero ¿llamarlo pelo de burra? Él lo consideró una ofensa mayor.
Lo tumbó Pelo e burra
Char se posesionó y arrancó con el mayor de los bríos su mandato en el Atlántico. Pero Ventura se quedó con su espinita por dentro, y con la ayuda de un par de abogados ratones de iglesia logró ganar una demanda en segunda instancia que quitó a Char de la Gobernación a mitad de mandato y subió Caiman Parao para terminar la otra mitad.
De inmediato Alex Char montó los preparativos para la campaña de su primera Alcaldía. Y ganó sin angustias no solo para poder terminar su período de 4 años, sino para elegir a su sucesora, Elsa Noguera, quien, justísimo sea decir, hizo una de las mejores administraciones de los últimos tiempos.
