Por: Manuel J. Anaya Acosta – Talento Onda Juvenil
Un primer tiempo de ida y vuelta, de intensidad y destellos de buen fútbol por parte y parte. Eso era lo que estábamos apreciando en una nueva versión del clásico costeño que se jugaba en el aún no terminado estadio Sierra Nevada en la ciudad de Santa Marta hasta que, un intenso aguacero, acompañado de tormenta eléctrica imposibilitara el inicio del segundo tiempo, que se jugó hoy a las 9 de la mañana.
Cuando apenas iniciaba el encuentro, una muy buena jugada a un toque, desarrollada por Cantillo y Sandoval terminó en falta dentro del área, desembocando en el primer gol del partido, convertido por Luis Sandoval tras una buena ejecución por debajo de la humanidad del guardameta samario. Sobre los 32 minutos una mano de Daniel Moreno permitió que Ricardo Márquez hiciera el gol de la paridad.
El juego de Junior no fue malo, pero tampoco fue arrasador y dominante como contra Jaguares. En los primeros minutos manejó la pelota y la intención de ataque hasta el gol de penal que llegó a los 5 minutos. A partir de allí, Unión Magdalena se volcó al ataque decididamente, arriesgando en la zona de volantes manteniendo a Abel Aguilar como único recuperador delante de la línea defensiva, lo que facilitó que Junior se replegara en campo propio y contraatacara aprovechando los pases de Cantillo y la velocidad de Daniel Moreno y el manejo de los tiempos de Teófilo Gutiérrez, teniendo algunas opciones de gol que no pudieron aprovechar. Debido a la intención de ataque del Unión, la defensa del Junior de vio vulnerable en varias ocasiones, sobre todo por la banda izquierda, por dónde más llegaban los atacantes samarios que fueron neutralizados por Viera, la figura del partido al salvar en unas 5 ocasiones el arco tiburón.
Para el segundo tiempo, el trámite del juego fue muchísimo menos intenso, como si todavía tuvieran las sábanas marcadas en la cara, pero con mayor vocación de ataque del cuadro local debido a su urgente necesidad de salir de la zona de descenso directo. Junior jugó la segunda mitad como un entrenamiento, además que varios jugadores estaban fuera de foco. Los cambios muy poco funcionaron y las únicas jugadas de riesgo fueron para el Unión, con un remate de media distancia que tapó el arquero Viera y un cabezazo de Piedrahita que casi termina en autogol.
Como ingeniero que soy, no puedo quedarme sin opinar sobre el desastre ocurrido en el estadio. No entiendo como puede ser posible que el estadio se inundara completamente por dentro y que de ahí se anegara también la cancha. No entiendo como la administración de Santa Marta aceptara desde hace tiempo el desarrollo de actividades deportivas en un estadio que no han terminado. No entiendo como no tienen un sistema alterno de suministro de energía eléctrica para por lo menos activar una motobomba para evacuar algo del agua del estadio. Pero bueno, estamos en chibchombia, el país del Sagrado Corazón, el país del realismo trágico, ya este tipo de sucesos no tendrían por que sorprenderme.
[caption id="attachment_108738" align="alignleft" width="990"] Tomado de: Marca Colombia[/caption]
Retornando al ámbito deportivo, esperemos que Junior levante su nivel, que pueda seguir siendo dominante y efectivo en ataque, que se consoliden esas sociedades y el buen nivel de jugadores como Cantillo, Teófilo, Sandoval y Matías Fernández que en los pocos minutos que ha tenido no ha desentonado. Los tiburones se mantienen séptimos con 19 puntos y el jueves reciben a la Equidad a las 16:00 en el estadio Metropolitano.]]>