Productores textiles colombianos enfrentan día a día el reto de competir con importaciones que atentan con la manufactura nacional.
Lexander Loaiza Figueroa @Lexloaiza
Confeccionar y comercializar prendas de vestir en Colombia no es una tarea fácil. El consumidor colombiano es exigente a la hora de elegir su ropa y está acostumbrado a productos de calidad.
Ariel Valencia, asesor comercial de la marca Quest en nuestro país, ha entendido esto, y son estos los principios que les han permitido permanecer de manera ininterrumpida en este competido mercado desde hace 21 años.
Lacháchara.co lo entrevistó en el marco de la 11ª Feria Internacional de Negocios y Franquicias que se desarrolla en Bogotá. La marca Quest tiene hoy en día 80 puntos propios de venta 17 franquiciados y 400 canales de comercialización al mayor.
Valencia dice que ha sido un trabajo arduo que ha combinado el uso de tecnología de última generación, buenas materias primas, investigación de mercado, innovación constante de sus propuestas y publicidad permanente. “Estamos en una economía muy dinámica que amerita la elaboración constante de propuestas de moda para satisfacer a los clientes”.
Mafias de la importación
A pesar del trabajo, la preocupación para la empresa estriba en el hecho de la amenaza permanente que implica la invasión de piezas textiles venidas de otros países, que entran de forma ilegal al territorio colombiano por los principales puertos, como lo son el de Barranquilla y el de Buenaventura.
“Le hemos solicitado al Gobierno a través de la Cámara Nacional de la Confección la protección de la producción local”, asevera Valencia. Sin embargo reconoce que la lucha no es fácil por la presencia de lo que definió como “grandes mafias” del contrabando que se encargan de patrocinar estas importaciones ilegales y a la vez defraudar al fisco, al no pagar los impuestos correspondientes a la nacionalización de mercancías.
No obstante, dice que están optimistas y confían en seguir comercializando sus productos por las tres vías que han utilizado hasta ahora: los puntos propios, las franquicias y los canales mayoristas. “Nosotros también tenemos buenos precios”, asegura como una de las razones de su permanencia en el mercado.