Por Sonia Márquez. Fotos : Sonia Márquez
Con pesar, hoy Barranquilla se viste de luto, ya que el Carnaval de Barranquilla 2024 ha llegado a su conclusión. Este año, marcado por una serie de eventos extraordinarios a lo largo de cuatro días, deja una huella en la memoria de los habitantes. Melissa Cure Villa, la actual Reina del Carnaval 2024, expresó su gratitud por el cálido afecto recibido de todas las personas, ya sea aquellos que siguieron las festividades a través de la televisión o quienes se sumaron a la celebración en las bulliciosas calles de la ciudad.
Lo más pequeños disfrutando. Foto: Sonia Márquez
Esta fusión de tradiciones y emociones sigue definiendo el Carnaval 2024, enriqueciendo la herencia cultural de Barranquilla. «La Muerte de Joselito» rinde tributo a la tradición carnavalesca, donde las cuentas pendientes, las viudas vestidas de luto, ya sea con barrigas de trapo o sin ellas, y los hombres entregados sin pausa durante estos intensos cuatro días, celebrando con bebidas y participando en los característicos juegos de maicena, son los protagonistas destacados en este desfile. Entre risas y lágrimas ficticias, este desfile representa una despedida de la fiesta que caracteriza a estos días, con la promesa de regresar al próximo año para seguir disfrutando.
La logística este año marca la importancia por su buen manejo ante situaciones y preservando la parte cultural, que es un agregado significativo de lo que fue estos vibrantes momentos del Carnaval de Barranquilla. “La muerte de Joselito” no solo se celebra para despedirse, sino que invita a la comunidad a reflexionar sobre loefímero y único que puede llegar a ser una celebración.
Sirley Cardona, señora Reina del Carnaval de Miami USA 2024.
A medida que concluyó el desfile, se pudo reflejar a Melissa Cure su satisfacción por la acogida de la gente y el arduo trabajo previo que realizó para presenciar lo vivido durante estos intensos cuatro días.
El cierre de esta festividad deja una impresión profundamente positiva y duradera en aquellos que disfrutaron al máximo con todo el tumbao’, convirtiéndose en un capítulo inolvidable en la historia del Carnaval.
